Por Eugenio Pacheco
CHETUMAL, Q. Roo.- La suspensión del servicio de comedores para alumnos de nivel básico en escuelas de tiempo completo generó confusión en los padres de familia de al menos tres escuelas primarias de la capital.
Por su parte, las autoridades de educación aseguraron que no hay razón para dejar de servir los alimentos a los menores, toda vez que se ha suministrado en tiempo y forma el dinero necesario para ello.
Con el argumento de no recibir los recursos económicos necesarios, las direcciones de las escuelas “Guadalupe Victoria”, en la colonia Lagunitas; y la “Belisario Domínguez”, en el centro, interrumpieron el servicio del comedor y recortaron el horario para retirar entre una y dos horas antes de lo establecido.
La situación género confusión entre los paterfamilias, quienes manifestaron sus inquietudes a través de las redes sociales, sobre todo porque no hubo aviso previó.
Sobre el tema habló la directora del Programa Escuelas de Tiempo Completo de la Secretaría de Educación, Roxana Granados Cuéllar, quien dijo que no existe ninguna razón por la cual debe cancelarse el programa de comedores, y deba retirarse más temprano de lo común, sobre todo porque los recursos económicos para ese tema están cubiertos en tiempo y forma.
Aseguró que realizará visitas de inspección en las escuelas para conocer de fondo el problema.
También habló sobre este tema el presidente de la Asociación de Padres de Familia del estado, Héctor Santín Gómez, quien afirmó que existen retrasos en algunos centros de enseñanza debido a los trámites administrativos que deben realizarse para obtener el dinero.
Explicó que estos procesos se refieren a las observaciones que se efectúan a la comprobación de gastos por adquisición de alimentos que los directores de las escuelas deben entregar mensualmente.
Sin embargo, aseguró que todos los directores deben tomar previsiones y tener a disposición alimentos no perdederos, a fin de que cuando ocurran estos retrasos no se suspenda el servicio de alimentos para los alumnos.
El beneficio de comedores escolares en Quintana Roo presenta problemas mínimos, y ninguno de ellos tiene riesgo de ser cancelado o cerrado temporalmente, dado que los recursos se entregan puntualmente a los directores de las escuelas, subrayó Roxana Granados.
De acuerdo a esta autoridad, ningún director o comité de padres de familia puede decidir por sí solo la cancelación del servicio, toda vez que está garantizada la entrega de alimentos con la inversión que realiza la federación, que mensualmente invierte entre 15 y 17 millones de pesos para este beneficio a los alumnos.
En Quintana Roo, 490 escuelas están dentro del esquema de tiempo completo, y 140 de ellas tienen servicio de comedor para sus estudiantes.
De estas 140, son menos de diez las que han presentado problemas por la falta de coordinación entre los padres de familia y la dirección del plantel.
Recalcó que las problemáticas más comunes en los planteles con observaciones por la operación del comedor es la falta de aportación de los papás, que en la mayoría de los casos es de cinco pesos por cada día hábil de clases, a cambio de una comida para sus hijos.