Así, por disposición del centro -y todo mundo voltea hacia el humorista político Hugo López-Gatell- se fijó el mapa epidemiológico vigente.

Joe Biden le ha tomado la delantera a López Obrador.

Presentó su proyecto de reforma migratoria, la gran esperanza de México, sin haber consultado a la principal contraparte del problema.

Ese dato ilustra las primeras señales y los términos de las nuevas relaciones del flamante Gobierno estadounidense con su par suriano.

De cualquier forma, desde Palacio Nacional, intérprete de por medio, ya le tienen la primera propuesta mexicana:

-Adiós a la Iniciativa Mérida.

En la última palada de esta inhumación va el odio del titular del Poder Ejecutivo a Felipe Calderón y su acuerdo de colaboración con George W. Bush.

Esto no significa el fin de la cooperación.

Si para Donald Trump la colaboración llegó al extremo de montarle muros con las Fuerzas Armadas -“tengo 26 mil soldados vigilando la frontera”, alardeaba el republicano-, la disposición seguirá en pie.

De eso dependerá un entendimiento migratorio, más generoso y menos violento, para no molestar a la nueva administración de Washington.

DE POLICÍA DE TRUMP A POLICÍA DE BIDEN

En contraparte, México escuchará nuevas peticiones.

La principal será crear un nuevo sistema de seguridad y se construirá al mayor nivel, sucedáneo de la Iniciativa Mérida pero distinto.

¿Por qué?

Porque según Estados Unidos anualmente mueren más de 82 mil ciudadanos suyos por drogas provenientes de México.

Principalmente fentanilo, heroína, crack y otras sintéticasÔǪ porque de mariguana nadie se muere.

Por la tarde nos enteraremos si hay innovaciones, pero no hay mucho para la esperanza de un arreglo donde México no sea el policía incondicional de Joe Biden como lo fue de Donald Trump.

Al capital le interesa mucho el tema comercial y ya sabemos:
Aquí anote usted la cancelación de proyectos y, obvio, la intención lopezobradorista de cerrar el acceso a generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, en especial de fuentes renovables.

De cualquier forma, las discrepancias tienen otra vía, los paneles escritos en el tratado bautizado por Trump como T-MEC.

IBA DE CÓNSUL A WASHINGTON, CAE AL IMSS

1.-Esteban Moctezuma ya está en Washington para asumir la embajada de México en Estados Unidos.

No tendrá mucho trabajo de entrada.

Por acuerdo de gobiernos los temas se tratarán al mayor nivel, entre Presidente y secretarios de Estado cuando sea necesario.

De cualquier forma, el ex secretario de Educación Pública llega sin su brazo derecho, el ex subsecretario Marcos Bucio.

Lo propuso para cónsul en Washington y ya estaba nominado cuando Zoé Robledo lo pidió como secretario general del IMSS.

Le fue concedido el deseo y surgió la instrucción presidencial de terminar la reconversión del Instituto -pasó de mil 250 a 13 mil 404 camas para Covid- y avanzar a la cobertura universal.

Es decir, quienes no pertenezcan a ningún organismo de protección social deben ser atendidos por el Seguro Social.

Lo que José López Portillo planteó con su plan IMSS-COPLAMAR, más la misión impostergable de privilegiar la medicina preventiva.

Las opiniones expresadas por los columnistas son independientes y no reflejan necesariamente el punto de vista de 24 HORAS QUINTANA ROO