Deja Héctor Suárez legado en la industria del cine; fallece a los 81 años de edad
Deja Héctor Suárez legado en la industria del cine; fallece a los 81 años de edad

De Héctor Suárez legado. El actor, comediante, personaje clave en la cultura popular mexicana, falleció a los 81 años de edad.

Fue Héctor Suárez Gomíz, su hijo, quien dio a conocer la noticia del fallecimiento la mañana de este martes.

“Con profundo dolor, queremos compartir con ustedes el fallecimiento de Héctor Suárez Hernández”, escribió en un breve comunicado, firmado, además, por la ahora viuda, Zara Calderón; el resto de los hijos, Julieta, Rodrigo, Isabella, y sus nietos, Paula, Ximena y Pablo Suárez.

“Para nosotros se va el papá, el abuelo, el hermano, el esposo y no la figura pública que merece todo el reconocimiento de la familia artística y los de medios de comunicación”, apuntó.

Aún no se dan detalles de la causa de muerte. En 2015, Héctor Suárez fue diagnosticado con cáncer; lo había vencido, aunque ahora no sabemos si de manera definitiva.

Deja Héctor Suárez legado en la industria del cine; fallece a los 81 años de edad

Deja Héctor Suárez legado; destaca en cine, teatro y tv

El actor y comediante destacó en diversos escenarios como el teatro, la televisión y el cine.

Entre sus trabajos más destacados en el cine destacan “El mil usos”, “Mecánica Nacional”, “El Mil usos 2”, “Doña Macabra”, así como “Atlético San Pancho”.

“El mil usos” es una cinta emblemática en la industria del cine nacional; narra las experiencias de un campesino mexicano de nombre “Tránsito”, quien decide dejar su tierra (Atlihuetzia, Tlaxcala) para ir a buscar fortuna a la Ciudad de México.

En la ciudad monstruo trabaja como cargador en la Merced, limpiador de mostradores, Santa Claus, limpiaparabrisas, vendedor de flores, bolero, vendedor, barrendero y mandadero. De ahí el sobrenombre de “mil usos”; ahí la crítica social que muestra a lo que se enfrentan los campesinos migrantes.

Uno de los momentos más recordados de la cinta es cuando “Tránsito” le mienta la madre a la Ciudad de México.

En la década de los 60, participó en rodajes de películas como La maldición de oro, dirigida por Jaime Salvador, en 1965; Lanza tus penas al viento, bajo la dirección de Julián Soler, en 1966, en la que dio vida al personaje de “Alejandro”, y para 1969 protagonizó la cinta No se mande, profe, al lado de Enrique Guzmán, Hilda Aguirre y Sara García.

Luego protagonizó como “Pantaleón Requejo”, en Ambición Sangrienta, de 1968; “Sargento Margarito”, en La marcha de Zacatecas, y “Marcelino”, en El ángel.

México, ra ra ra, El Buscabullas, ¡Oye Salomé! y Picardía Mexicana fueron algunas de las cintas en las que actuó en la década de los 70.

Desde entonces fue un actor activo, que luego se decantó por hacer sátira política. Uno de los momentos más álgidos de su vida fue cuando, con un sketch, se mofaba del ex presidente Enrique Peña Nieto por la compra de la lujosa Casa Blanca en que vivían, adquirida a uno de sus contratistas favoritos. Después de eso, Suárez recibió mucha presión laboral, que también denunció de manera pública.