El cantante Ozzy Osbourne aclaró los diversos rumores sobre su estado de salud esta semana, al revelar que fue diagnosticado con la enfermedad del Parkinson.
Osbourne y su esposa, Sharon, fueron entrevistados por Robin Roberts en el programa de televisión “Good Morning America”, donde el legendario rockero confirmó que desde febrero del 2019 le fue diagnosticada dicha enfermedad.
“Ha sido terriblemente desafiante para nosotros”, dijo sobre el año pasado. ‘Tuve que someterme a una cirugía en el cuello que me atornilló todos los nervios. Descubrí que tengo una forma leve de … ‘, dijo antes de mirar a su esposa para terminar su oración.
Sharon intervino: ‘Es Parkin 2, que es una forma de Parkinson. Hay tantos tipos diferentes de Parkinson’. ÔÇï
“No es una sentencia de muerte por ningún tramo de la imaginación, pero sí afecta ciertos nervios de tu cuerpo. Y es como si tuvieras un buen día, un buen día, y luego un realmente mal día”.
Comenzó, dijo, cuando sufrió una caída el año pasado y tuvo que someterse a una cirugía.
Después de eso, comenzó a experimentar dolor en los nervios y los médicos han tenido dificultades para determinar si la caída, la cirugía o su afección son los culpables de su afección.
Aunque su familia lo ha ayudado desde que se le diagnosticó la enfermedad, se le ha hecho difícil no trabajar.ÔÇï
OZZY OSBOURNE ARRANCÓ LA CABEZA A UN MURCIÉLAGO
El 20 de enero de 1982, durante un concierto en el Veteran’s Memorial Auditorium de Iowa, Ozzy Osbourne arrancó la cabeza de un murciélago con una mordida convirtiéndose en una de las anécdotas de la historia del rock, más polémicas.
Osbourne estaba en plena gira promocional de su segundo álbum como solista, Diary of a madman cuando uno de sus fanáticos (después fue identificado como Mark Neal) le arrojó el murciélago, que ya estaba muerto.
Ozzy Osbourne vio al animal en el escenario y pensó que era de goma, lo tomó y se lo llevó a la boca. El cantante ha detallado en sus memorias que “Inmediatamente, sin embargo, algo se sentía mal. Muy mal. Para empezar, mi boca se llenó instantáneamente de este líquido cálido y sombrío, con el peor regusto que puedas imaginar. Podía sentirlo manchando mis dientes y corriendo por mi barbilla. Entonces la cabeza en mi boca se contrajo. Oh, jódeme, pensé. No fui a comer un maldito murciélago, ¿verdad?”.
La cabeza del murciélago se desprendió, y tras terminar el show, el músico debió acudir al Broadlawns Medical Center para vacunarse contra la rabia.
Con información de Agencias