Tiempo Nuevo
Por:
Salvador Guerrero
Correo: sgchipres1@hotmail.com // Twitter: @guerrerochipres

En México hay más de 400 mil personas que son “incapaces” de ser culpables. Ni las Fiscalías, ni las Policías, ni las Fuerzas Armadas pueden ejercer acciones sobre ellas porqueÔǪ jurídicamente ni siquiera existen.

De acuerdo a la información presentada ayer por el presidente del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, Julio Santaella, 40% de un total de un millón tres mil 702 personas nacidas en México que carecen de actas de nacimiento son adultos.

Seis de cada 10, precisó, son menores o adolescentes. Eso nos deja con 401 mil 481 adultos, en mi estimación con base en sus datos, sin derechos ni probabilidad de que sean distinguidos formalmente dentro del Sistema de Justicia.

Ello se agrega a una de las variantes de la observación sobre el avance de las capacidades del Estado Mexicano por hacer vigente el Estado de Derecho asociado con el mantenimiento de la seguridad, la paz y la vigencia de la justicia.

El problema estratégico para la seguridad pública de todo el país, incluso en el nuevo esquema de coordinación que se esfuerzan en construir las nuevas autoridades federales y estatales con diversos grados de eficiencia y compromiso, es que algunos de esos inimputables -por ausencia de existencia jurídica- puedan ser reclutados por organismos del crimen concentrados en aprovechar todos los huecos que pueda exhibir el sistema.

Si hay personas dispuestas a llevar a sus hijos a “pinchar” un oleoducto, si las hay en algunas entidades dispuestas a “vender” a sus hijas en las redes de trata, si existen quienes involucran a miembros de sus comunidades en actividades que dañen la integridad física y el patrimonio de otras personas que conocen desde la infancia, es necesario pensar en los datos expuestos por el presidente del INEGI.

Como saben los abogados y deberíamos saberlo todos, la imputabilidad es la capacidad de cualquier sujeto para ser sancionado por la norma penal, y está asociada a una edad, una condición mental y es un presupuesto básico para que se establezca la culpabilidad.

Son imputables los mayores de edad y quienes no sufren de serias limitaciones mentales.

Los expertos hablan de la “capacidad de la culpabilidad”. Sin ella no puede establecerse formalmente la acción penal.

La probabilidad de que una persona ejerza sus derechos, de un lado, o sea imputable, de otro -es decir, que la afectación de los derechos de otro tras la comisión de un delito impliquen el castigo impuesto por un juez sobre una persona- está estrictamente asociada a la identidad y a su existencia jurídicaÔǪ a que tenga acta de nacimiento.

De acuerdo a la información compartida por Santaella, las entidades con mayor rezago en materia de actas de nacimiento son Chiapas y Baja California; y las que han realizado mayores avances en la materia son Yucatán y Aguascalientes. Por el análisis de la información puede deducirse que es un buen dato que los registros de recién nacidos se efectúen en los primeros dos meses de vida.

La falta de registro de 400 mil personas es un dato más cuya evolución deberemos observar en esta administración.

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