Blinda Alemania fronteras ante nuevas cepas del coronavirus. Quedaron cerrados los límites con la República Checa y el Tirol austríaco; solo podrán ingresar ciudadanos o residentes, o quienes prueben motivos familiares o laborales, además de trabajadores trasnacionales, personal sanitario y transportistas de mercancías que presenten una prueba PCR que los avale libres del virus.
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“Las personas que no formen parte de las pocas excepciones autorizadas no podrán entrar”, zanjó Horst Seehofer, ministro del Interior.
Este hecho provocó roces con la Unión Europea; sin embargo, el país teutón podría incluso cerrar sus fronteras con Francia, específicamente con la región de La Mosela, donde hay alta incidencia de las nuevas cepas.
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Cientos de automovilistas se apresuraron a cruzar la frontera antes del cierre formal, y protestaron contra la medida.
“Tenemos curiosidad por saber qué pasará luego, ya que hacerse un test cada semana, y además pagarlo, sería un desastre”, afirmó Milan Vaculka, un camionero.
El miércoles, la canciller Angela Merkel y los poderes regionales prolongaron hasta el 7 de marzo el cierre de la vida pública ante el temor a la propagación de las nuevas variantes.
Blinda Alemania fronteras ante nuevas cepas del coronavirus; movilizan a mil uniformados
Para mantener el control en las fronteras, el Gobierno alemán movilizó a más de mil policías, quienes, a partir del domingo prohibieron el acceso de medio millar de vehículos.
Karl Nehammer, ministro del Interior de Austria, consideró inaceptable la prohibición de usar un atajo de una región austriaca a otra.
La Unión Europea tampoco está de acuerdo con las medidas, pues considera que no son una solución efectiva, y la única alternativa son las vacunas y las medidas de prevención sanitarias.
Con información de Milenio.