Cafeterías de Cancún luchan por sobrevivir, ajustándose a la nueva realidad, implementando protocolos sanitarios y esperando comensales en tiempos donde la confianza a salir no es mucha y la economía familiar se ha tornado precaria.
Antes de reabrir, Café Por Favor, ubicado cerca del centro de Cancún, tuvo que certificarse ante las autoridades de salud para demostrar que implementaría todas las medidas de cuidado requeridas para evitar contagios de coronavirus.
Durante el confinamiento, el café ofreció servicio a domicilio, lo cual le garantizó modestas entradas que le ayudaron a pagar la renta del local.
A partir de que el semáforo de riesgo en la entidad cambió a naranja, con lo cual se permite abrir a los comercios y atender con 50% de capacidad, las ventas mejoraron, aunque solo un poco.
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Cafeterías de Cancún luchan por sobrevivir; resienten la crisis económica provocada por la pandemia
“Creo que va a estar muy difícil. No es como que la gente vaya a trabajar y ya empiece a gastar. Ya van meses de que algunos adquirimos deuda y pues la gente no va a gastar mucho. Tampoco ha llegado mucho turismo y eso se refleja”, comentó Claudia Gómez, de 52 años, dueña de la cafetería.
“Para que los destinos vacacionales salgan más rápido de la crisis económica, hace falta consumir a productores locales”, dijo recientemente Miguel Torruco, secretario de Turismo federal.
Son éstos y no las grandes corporaciones las que padecen más los estragos.
Desde antes de la pandemia, Claudia ya prefería a productores locales.
“Nosotros empezamos con esto desde antes, tratando de hacer eso que llaman comunidad: tratar de unirnos entre nosotros”, dijo.
Con información de Ricardo Hernández