Alrededor de quince personas trabajan desde ayer para reparar los daños que dejaron los sucesos del domingo por la tarde, en la famosa glorieta del Ceviche.
Los trabajadores reportan que se necesitan más de 300 litros de pintura, así como thiner, estopa, escobas, cubetas, agua y mano de obra, para poder devolver el aspecto al monumento.
La supervisora del área de pintura, Oralia Martínez, mencionó que desde la tarde del lunes, iniciaron los trabajos de reparación, donde el primer día participaron 15 personas y el martes fueron 17, para concluir con el área afectada, así como las calles y los lugares cercanos donde también hubo actos vandálicos.
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Las manifestaciones deben ser pacíficas
Martínez, comentó que este tipo de actos violentos que daña los patrimonios históricos no se deben de permitir, ni realizar porque afectan la imagen turística de la ciudad, y dejan daños que costeamos todos los ciudadanos.
“A todo el pueblo nos cuesta pagar porque todos pagamos impuestos, y la reparación viene del bolsillo de todos los ciudadanos”, agregó.
Opinó que todas las manifestaciones para protestar se deben de permitir, pero si son de forma pacífica sin dejar daños a terceros y cumpliendo lo que realmente con el objetivo de las mismas.
Con información de La Verdad