CANCÚN, Q. Roo.ÔÇö Sara Rincón Gallardo, presidenta de la Sociedad Protectora de Animales, opinó que la polémica en torno a las peleas de gallos y corridas de toros no son el principal problema con la fauna silvestre y doméstica y destacó que nunca fue convocada para hablar sobre la Ley de Protección y Bienestar Animal. “Fui a una mesa, entregué un libro sobre bienestar animal y nunca me volvieron a hablar”.
Si bien la ley no se ha publicado, no sé cómo quedó. Necesitamos conocerla todos los ciudadanos para saber si es la adecuada o si la dejaron como estaba la anterior. Esa sí la conozco y no sirve, subrayó.
Las peleas de gallos y las corridas de toros no son los únicos problemas, pero han servido a los diputados para lucimiento. En México y Cancún hay que combatir el tráfico de fauna silvestre, proteger a la fauna doméstica y prevenir el maltrato a la fauna de consumo. ¿Acaso los diputados no han visto cómo maltratan a los puercos, a las vacas o a los caballos en el rastro? ¿Han hecho algo para garantizar vigilancia en los rastros? ¿Se conoce el estado de esas instalaciones y que se use pistolete para sacrificar a los animales?, expresó.
Para la entrevistada el maltrato a los animales no es cuestión de estadística, sino de calidad y valor humano y se da por falta de educación, ya que es aprendido de adultos a quienes los niños ven matar a un pájaro o patear a un perro. “Ahí empieza el maltrato y es donde hay que atacarlo”, dijo.
En Quintana Roo el maltrato animal ha subido de tono. Hay asesinatos de animales, envenenamientos, abusos. Voy a montar una exposición con fotografías de las denuncias que me llegan, de gente desesperada que pide apoyo para salvar animales, añadió.
Según dijo, a diario recibe de cinco a seis llamadas, las cuales canaliza con Gabriel López Ceballos, director de Protección y Bienestar Animal. “También me ayudan los bomberos, porque en Ecología nunca atienden las solicitudes de ayuda”.
Las autoridades hablan mucho de que me ayudan, pero nos tienen a Gabriel y a mí en lo peor. Él trabaja de milagro, hace milagros porque las oficinas municipales están en condiciones deplorables.
Mientras el gobierno del Estado y el municipal no entiendan que en un país o estado la cultura se muestra en el trato hacia los animales, no lo vamos a lograr. Hay que poner sanciones severas en la ley, afirmó.
Y relata un caso reciente de unos sujetos que llegaron a una casa vecina, sacaron a una perra y la apalearon, la ahorcaron, la arrastraron y la fueron a tirar. Sin embargo, la denuncia no procedió.
Mientras no haya una ley bien hecha, como en Estado Unidos, no se resolverán esos problemas, continuó. En Holanda se unieron la ciudadanía, el gobierno y los empresarios y hoy no hay perros callejeros. Se hizo como aquí, operar, dar en adopción y llevar a todos los animales a un lugar.
En su opinión, salvo excepciones, ha faltado unión al gobierno y a los empresarios.
Con información de INFOQROO.