CDMX.- Irene O’Shea es una mujer australiana de 102 años que acaba de lograr un récord: convertirse en la persona de mayor edad en aventarse en paracaídas.
La aventurera brincó el pasado fin de semana en el sur de Australia a 14,000 pies de altura con su instructor Jed Smith, de 24 años. El descenso fue a unas 136 millas por hora antes de que se abriera el paracaídas.
Sin embargo, la decisión que tomó Irene no fue solo por sentir la adrenalina, pues también hizo esto para recaudar fondos en beneficio de la Asociación de Enfermedades de las Neuronas Motoras del Sur de Australia, una organización que investiga la cura de una enfermedad de la neurona motora, que causó la muerte de su hija hace 10 años.
“O’Shea se convirtió en la paracaidista más vieja del mundo con 102 años, creando conciencia y recaudando dinero para ayudar a encontrar una cura para la enfermedad de la neurona motora”, escribió en YouTube SA Skydiving, la compañía que organizó su salto.
“El cielo estaba despejado e hizo un buen día, aunque pasé mucho frío”, explicó Irene en declaraciones a la prensa australiana y aseguró que se sentía “normal” en el aire, mientras que sus familiares, amigos y sus nietos la esperaban abajo.
Sin embargo, este no fue su debut en paracaídas, ya que su primer salto ocurrió en 2016, el día en que cumplió 100 años.
Antes de esta proeza, Bryson William, con 101 años había obtenido el récord de la persona con más años en lanzarse, pero O’Shea llegó para arrebatárselo a sus 102 años y 194 días.